Cuando vamos a montar una colección temática generalmente nos decidimos por un tema que nos gusta, que forma parte de nuestro trabajo, hobby etc. por lo que partimos de una base con unos conocimientos, pero no debe quedar ahí, ni consultar un libro o una web, tenemos que hacer una investigación y demostrar unos conocimientos, que realmente demostramos que dominamos el tema. Cuanto mayor sea el conocimiento del tema, mayores facilidades tendrá el coleccionista para desarrollar y profundizar en el tema elegido.
Cuando más información tengamos más se enriquecerá el plan por lo tendrá una mayor amplitud y posibilidades de ampliarlo, nos proporcionara un desarrollo más profundo y aspectos originales en el tema a tratar. Por lo tanto la investigación temática requiere leer libros, revistas, artículos de prensa, catálogos, páginas web, etc. Nunca cogeremos un solo libro y a partir de hay hacer el plan. Otro error que se suele cometer a menudo, es hacer el plan a partir del material filatélico que poseemos, esto consecuentemente nos va a dar un plan corto y flojo, por lo que al mismo tiempo tendremos un desarrollo flojo y perdemos la posibilidad de ampliarlo con elementos originales, es decir que existe mucho material filatélico no lo incorporamos a la colección por no saber relacionarlo con ello. Una buena investigación temática nos trae consigo el descubrimiento de piezas filatélicas de inimaginable valor para la colección. Esto nos aporta una importante puntuación en:
- Estudio personal
- Conocimientos temáticos
- Creatividad e innovación
- Desarrollo
Un claro ejemplo de investigación temática que al mismo tiempo le incorpora otro material que en un principio nada tendría que ver con el tema lo podemos observar en las siguientes láminas de la colección “4000 años de Hockey sobre hierba” de Jorge Pulido...
1 comentario:
El salto de 5 a 8 siempre es una salto peligroso donde algunas colecciones se descalabran...
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