Más vale prevenir... que lamentar

Artículo de ©Victor Lora

Nuestras colecciones temáticas se nutren de multitud de materiales filatélicos (sellos, aerogramas, matasellos, bocetos…) y todo filatélico desea que estén en perfectas condiciones. Como sabéis estos objetos son muy delicados por su composición orgánica (Papel, goma, tintas…) y están expuestos a sufrir diversas amenazas como la oxidación. Si no se toman medidas para prevenir estas amenazas, pueden llegar a destruirlos.

EMPECEMOS POR EL MATERIAL QUE PROTEGERÁ NUESTRAS COLECCIONES

Os aconsejo que adquiráis  álbumes, hojas, clasificadores y filoestuches de la mejor calidad para que nuestros tesoros tengan una conservación óptima.

Filoestuches para proteger los sellos y cartas

Clasificador para poner nuestros sellos repetidos o organizar nuestras
hojas temáticas antes de colocarlas en sus hojas de álbum

Hojas de álbum elaboradas por una marca

Actualmente, la gran mayoría de los temáticos confeccionan sus hojas de álbumes a través del ordenador y os recomiendo que utilicéis papel neutro o alcalino, libre de ácido (porque si no con el tiempo se amarillea y se vuelve quebradizo, destruyéndose él y arruinando los sellos que estén encima) con un gramaje entre 140 a 170 grs. /m2.

Hoja A3 elaborada con el programa Microsoft Office Publisher 2003

Aquí una información extra sacada de la Web de “Filaposta”

“El ácido es un elemento agresivo que algunos papeles contienen y que generan una reacción química al contacto con la luz, el medio ambiente y otros elementos externos, ocasionando que este se deteriore y afecte su composición. Al momento de su elaboración se controla químicamente para darle un PH mayor a 7.0. El PH es la unidad con la cual se mide la acidez o alcalinidad de un material. Los papeles con un PH menor a 7.0 se consideran ácidos y los papeles con un PH mayor a 7.0 se consideran LIBRES DE ÁCIDO O ALCALINOS. Por lo tanto al controlar el grado de acidez del papel, este conserva sus propiedades y características físicas a través del tiempo. Un papel libre de ácidos se le da la categoría de Archival y como principal característica presenta una expectativa de vida de más de 100 años.”

A CONTINUACIÓN DONDE VAN A ESTAR Y SU MANEJO

El mejor sitio es en una estantería que puede ser de metal o de madera. El metal tiene la ventaja de no ser atacada por insectos, aunque puede provocar condensación en ellas. En cambio las estanterías de madera no se calientan fácilmente ni se enfrían tan rápido como el metal, el  problema que tienen es que pueden ser atacadas por termitas.

Las estanterías no deben colocarse al lado de focos de calor como estufas o al lado de las ventanas, lo suyo es que estén en medio del salón o de una habitación y no cerca de las paredes exteriores de la casa.

Hay que mantener una buena circulación y ventilación de aire en las estanterías y es aconsejable ventilar la habitación diariamente y si tenemos estanterías cerradas abrirlas periódicamente para que no se acumule humedad en ellas. También es recomendable una limpieza periódica de la habitación, estanterías y de los propios álbumes y clasificadores.

Estantería cerrada con puertas correderas

Estantería abierta

Los álbumes y clasificadores no deben estar muy apretados. El aire debe poder circular bien entre y detrás de ellos para que no se acumule humedad.

Los clasificadores al tener un tamaño folio deberán colocarse en posición vertical, para que los sellos, sobres… no soporten un peso excesivo para que no se peguen entre las hojas. Por otra parte, los álbumes pueden ser de dos tipos, tamaño folio que serán colocados en posición vertical y tamaño A3 que serán colocados en posición horizontal para que las hojas no se doblen. Os recomiendo que para guardar las hojas A3 compréis cajas libres de ácido sin anillas, donde colocaremos las hojas sin sus fundas de plásticos (Estas fundas la utilizaremos para exponer nuestras colecciones) y colocaremos entre hoja y hoja papel cebolla. No excederse en la cantidad de hojas por caja para evitar un peso excesivo. Con treinta hojas por caja es suficiente y de vez en cuando sacar las hojas para que los sellos, cartas… se aireen.

Caja libre de ácido para guardar las hojas A3 (Se pueden encontrar en tiendas especializadas de pintura).

Cada Vez que tengamos que sacar algún álbum tamaño folio o clasificador de nuestra estanterías, deberíamos cogerlo siempre por el lomo. Si lo cogemos por la parte de arriba puede dañarlo y generalmente termina por romper o despegar esa área del álbum o clasificador.

Antes de hojear nuestras colecciones tenemos que tener las manos limpias y siempre hay que coger los sellos o documentos filatélicos con pinzas, guantes de algodón o látex.  Si se hace con los dedos se corre el riesgo que los aceites naturales, el sudor de nuestra piel se traspasen al sello, hojas de álbum…

Mientras estemos hojeando nuestras colecciones, no debemos ni beber, comer y fumar. Un ligero descuido puede provocar daños irreparables.

Y PARA FINALIZAR CUIDADO CON LA HUMEDAD, TEMPERATURA Y LUZ

Nuestras colecciones no deberán guardarse en sitios húmedos porque produce las famosas manchas de óxido. Estas son provocadas por unas esporas de hongos que se encuentran en el ambiente y cuando la humedad relativa supera el 65% y temperaturas de 27ºC o más, entran en actividad alimentándose de la materia orgánica que contengan los sellos, hojas, documentos… causando su desintegración. Para prevenir la aparición de estos hongos, es necesario mantener las colecciones en ambientes secos (con humedad relativa de 50% o menos) y frescos (temperaturas estables en torno a los 20ºC.).  Mientras más humedad y calor haya, más propensos son los hongos en desarrollarse en el papel.

Es aconsejable tener cerca de las colecciones un recipiente con productos químicos que absorban la humedad. Estos se pueden encontrar en supermercados y se venden en recipientes ya preparados. El agua procedente de la humedad de una habitación se concentrará en ese recipiente, evitando que llegue a las colecciones.  También se pueden utilizar las bolsitas de gel sílice que se pueden colocar junto a los clasificadores o álbumes. Estas se pueden encontrar en las cajas de los zapatos que compréis.  Cuando detectemos  que el producto se endurece mucho y queremos volverlo a utilizar, con dejarlos al sol fuerte o microondas durante unos segundos serán suficientes para que expulse la humedad acumulada y se vuelvan a usar de nuevo.

Bolsas de gel sílice

Es importante también airear las colecciones cada cierto tiempo y de paso limpiaremos nuestros álbumes, cajas y clasificadores con un trapo seco el posible polvo que se haya acumulado en ellos.Tampoco deberán conservarse en lugares con temperaturas elevadas, ni expuestas al calor de las estufas o rayos solares de forma prolongada, estas amenazas pueden provocar que los sellos se abarquillen.

Otro factor que interviene en la degradación de los sellos es la exposición prolongada de la luz solar o artificial. Debido a los rayos ultravioletas que contienen, se produce el debilitamiento y friabilidad de las fibras de celulosa del papel, haciendo que éste se vuelva quebradizo y se descolore, tornándose amarillento u oscureciéndose. En estos casos la luz actúa como catalizador provocando la oxidación del papel.

Espero que estas medidas, les sean de utilidad para la conservación de sus colecciones temáticas y que tengan una vida sana y duradera. Si conocéis nuevas medidas para la conservación de vuestras colecciones, este es el lugar indicado.

Fuentes:

• Filaposta
• Fundación Albertino de Figueiredo para la filatelia