Cuando Seebeck "descubrió" a Colón

Artículo de ©F Piniella

Las emisiones abusivas e ilegales de sellos también tuvieron a Colón como protagonista y precursor. Joaquín Amado  publicó un artículo titulado “El ardid de un ingenioso empresario inundó el mundo de reimpresiones de sellos”, refiriéndose a un curioso personaje, Nicholas F. Seebeck. Este comerciante neoyorquino y a su vez gerente de la Hamilton Bank Note Co. of New York tuvo la “brillante” idea de hacer de la emisión de sellos un negocio tal como hoy estamos viendo con determinadas naciones que apuestan por la filatelia especulativa (¿llegarán a “matar la gallina de los huevos de oro”?). Nicholas Seebeck emigró a los Estados Unidos a la edad de nueve años. Pronto se estableció como un distribuidor autorizado de sellos como una actividad secundaria para ser posteriormente propietario de una papelería y una tienda de impresión en la ciudad de Nueva York. En sus tareas de investigación filatélico publicó un Catálogo de "Todos los sellos conocidos de los Estados Unidos y el Extranjero" con precio y numeración, todo ello ya en 1876. En 1879 comenzó a imprimir sellos de la República Dominicana y el Estado colombiano de Bolívar, bajo una especie de contrato estándar de impresión en la que él cobraba con una cuota de la impresión de un número determinado de sellos. Seebeck llegó a tener un éxito significativo como empresario vendiendo su negocio en 1884 y la compra de una participación significativa en la Hamilton Bank and Printing Co., cuyo contrato principal fue para la impresión de billetes para el sistema de transporte de la ciudad de Nueva York.

Retrato de Nicholas Seebeck
Pero volviendo a su parte filatélica, era el año 1890 cuando Seebeck firmó un acuerdo con determinadas Repúblicas centroamericanas para la impresión y provisión de sellos de correos. El precio del servicio era nulo o muy bajo con relación al coste que ello suponía, ¿la trampa?, que él conservaría las planchas originales y todos los sellos que no fueran vendidos cuando estos “caducaran” (desmonetizándolos), Seebeck se reservaba el beneficio de ponerlo a la venta a través del comercio filatélico sin ninguna limitación en el tiempo. En la operación estuvieron los gobiernos de El Salvador, Honduras, Nicaragua y Ecuador que empezaron a recibir los sellos desde Nueva York a partir del año 1892. El pliego incluía sellos y emisiones timbradas, tanto tarjetas como sobres. Las primeras reacciones no se hicieron esperar, las asociaciones incipientes de filatelistas levantaron una auténtica cruzada contra el especulador Seebeck. En muchas revistas americanas se publicó una carta con un título sugerente: "The crusade against the so-called Seebeck issues"

Prueba de emisión de una tarjeta de El Salvador 

Seebeck como establece Danilo Mueses (1992) era ¿un héroe o un villano? Una vez asegurados los contratos, Seebeck suministró cuatro series diferentes a Ecuador, cinco a Honduras, nueve a Nicaragua y diez a El Salvador. La parte buena del negocio estaba en la renovación frecuente de nuevas emisiones, unos sellos, sobres y tarjetas que eran de magnífica calidad tanto en su impresión como en el diseño, ¿quién iba a protestar? Los motivos eran diversos: paisajes, motivos nacionales de estas jóvenes Repúblicas, los retratos de presidentes y políticos nacionales, y como estrella las series con escenas del descubrimiento. Todo bellamente grabado, ¡perfecto!, solo faltaba que cada año se invalidaran (desmonetizaran) las emisiones. La falta de honradez por parte de Seebeck estaba en que una vez desmonetizadas las series, se limpiaban las planchas y reutilizaban. Comenzaba el negocio de producir reimpresiones de estos mismos sellos para comerciantes mayoristas filatélicos. Pronto Europa, los Estados Unidos, estaba inundado de sellos centroamericanos de bella factura a un precio asequible: se vendían a mucho menos del facial. Seebeck utilizó durante años todos los conductos comerciales a su alcance. Las reimpresiones son de un papel más basto y existen diferencias en las tonalidades de las tintas de los sellos. El plan Seebeck, si lo analizamos desde la perspectiva filatélica, nos puede parecer aberrante, pero desde el punto de vista de un país pobre, unas jóvenes Repúblicas sin medios nacionales propios para producir sus emisiones postales ni un adecuado presupuesto para encargarlas en el exterior ¿quién moralmente se opondría a ello? Actualmente los comerciantes europeos y norteamericanos siguen haciendo lo mismo con las Administraciones de Correos de muchos de estos países en vías de desarrollo que confían sus políticas emisoras a agentes externos. Incluso una vez rescindidos los contratos con Seebeck muchos de estos países siguieron con la costumbre de producir nuevas emisiones cada cierto tiempo y desmonetizándolas tan pronto se usaban. En una década el desprestigio filatélico salpicó a todos los sellos sudamericanos que dejaron de tener interés para el coleccionista. Incluso en los vecinos que no habían puesto en práctica esta política especulativa estuvieron afectados del “síndrome Seebeck”.

Seebeck sabía de la popularidad de Cristóbal Colón en América, ya Chile hacía años que utilizaba su imagen, de ahí que apostara por los motivos del IV Centenario del Descubrimiento: la imagen de Colón avistando América o desembarcando se repetía entre las emisiones de estos países. El dentado de los sellos fue de 12, aunque dado el carácter especulativo era normal que aparecieran variedades de todo tipo, sin dentar, etc. En la siguiente Tabla aparecen los valores faciales de estas series colombinas de Nicholas F. Seebeck:


Salvador
Honduras
Nicaragua
1c.
verde
pizarra
marrón
2c.
naranja marrón
blue
vermeil
3c.
ultramar pálido


5c.
pizarra/gris
verde manzana
azul
10c.
rojo pálido
verde azulado
pizarra
11c.
marrón


20c.
naranja
vermeil
granate
25c.
granate
naranja marrón

30c.

ultramarino

40c.

naranja

50c.
amarillo
marrón
violeta
75c.

carmín

1p.
carmín
violeta
marrón
2p.


Verde
5p.


carmín
10p.


naranja
1 peso = 8 reales = 100 centavos


Nicaragua – 1892
Nicaragua tenía tres tipos de tarjetas timbradas: el valor de 1c para impresos y 2c y 3c para nacionales e internacionales respectivamente. En los sobres se imprimieron de 5, 10 20 y 25 centavos. El diseño central era la misma imagen que luego se emplearía en los sellos de 1c de la serie colombina de EE.UU. 1893, es decir el grabado de la pintura de W. H. Powell. Los valores eran: 1c, 2c, 5c, 10c, 20c, 50c. 1p, 2p, 5p, 10p. Se sobrecargó igualmente la serie con “Franqueo Oficial” y “Telégrafos”.

  

Sello tipo
Sobrecarga para uso oficial
Sobrecarga para telégrafos

Sobre enteropostal
Tarjeta enteropostal

Honduras – 1892
El diseño de los sellos de Honduras es el retrato de Anvers de Nápoles en el que Colón hace ver a Pedro Gutierrez cómo avista una luz en tierra. Las tarjetas timbradas de Honduras eran de 2c y 3c para uso interno y externo respectivamente. Los sobres fueron impresos con los faciales de 1c, 5c, 10c y 25 centavos. El de 20c era doble. Los sellos fueron de 1c, 2c, 5c, 10c, 20c, 25c, 30c, 40c, 50c, 75c y 1p.

  


El Salvador – 1892
Se emitieron tarjetas timbradas de 1c, 2c y 3 centavos para tarifa urbana, interurbana y para el extranjero respectivamente. Para los sobre hubo una gran variedad de faciales: 1, 5, 10, 11, 20 y 22 centavos. Abajo algunos ejemplos de las colecciones David G. Chiang, Piniella y Martín de Bustamante.


Abajo pruebas de color de la marca del sobre timbrado.


A continuación algunos sobre enteropostales circulados.
(Colección David G. Chiong)


El Salvador – 1893
En este año aparecieron tres sellos: 2p Colón funda “La Isabela”; 5p Estatua de Colón en Génova y 10p Salida de Palos. En general, no sólo de El Salvador, de las emisiones de Seebeck, existen muchas pruebas sin dentar de un papel similar al de los sellos pero con variaciones de colores. Estas fueron realizadas para la venta filatélica aunque en teoría se hacían para que las Administraciones de Correos pudieran elegir el color final en el que saldrían los sellos

Colón funda "La Isabela"
Prueba con interpanel
Monumento a Colón en Génova según la foto de la época

El Salvador – 1894
Una nueva emisión apareció en 1894 con diseño relativo al Descubrimiento: 2p azul con el Cuadro de Rotting de “Colón en Salamanca”; 5p carmín “Colón ante los rehenes” y 10p “Los Reyes Católicos en Barcelona”.

Prueba en B4 en color rojo, el elegido final fue azul
Prueba de punzón del sello de 2p, El Salvador 1894
Dibujo del artista para el diseño del seño de 10p, El Salvador 1894

El Salvador - 1896/97
El último Seebeck “colombino” de El Salvador fue el emitido entre 1896 y 1897 con cambios de color y con diferentes sobrecargas. El retrato de Colón volvía a ser utilizado por Nicholas F. Seebeck:




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Bibliografía
  • Fosbery, J. "The Seebeck sets of 1892" Discovery vol.5 nº3(19) 1987. 
  • Green, I. "That Man Seebeck" American Philatelic Congress 1946. 
  • Hahn, J.; Sousa, J. "El Salvador, the Seebeck Stamps" American Philatelic Congress 1977/1978. 
  • Kehr, E.A. Destruction of the Seebeck Nicaraguan Dies, Transfer Rolls and Clichés, The London Philatelist, No 711, pp. 22 – 24, February 1952
  • Linares, J. El ardid de un ingenioso empresario inundó el mundo de reimpresiones de sellos. Fuente: Coleccionismo & Inversión 2004
  • Mueses, D.A. Seebeck: ¿Heroe o Villano?   Santo Domingo, 1992. 170pp. 
  • Nye, D. "Nicholas Seebeck - New York Philatelist and entrepreneur" Discovery vol.12 nº3(47) 1994.
  • Quast, A., Willer, R. The Seebeck Issues of Nicaragua, The Collectors Club Philatelist, NY, 1968
  • Seebeck – Held oder Gauner ? BSV BERLINER BÄR e.V. Briefmarkensammlerverein Berlin-Tempelhof
  • Welch, B. Minutes of the Hamilton Bank Note Company, The Seebecker, 1990
  • Página de Wikipedia.

2 comentarios:

Gándara dijo...

Excelente trabajo Paco !!!! esto no lo conocia.

Unknown dijo...

hola amigo te queria contar que tengo las estampillas con orden de telégrafo como la azul que mostras en sus distintos valores .por algo arranco la colección ja ja saludos.