Artículo de ©J.P. Aguilar
Italia fue el segundo país al que le tocó organizar por dos ocasiones una Copa del Mundo. Nuevamente se enfrentaron veinticuatro selecciones: cuatro sudamericanas (Argentina, campeón reinante, Brasil, Colombia y Uruguay); dos de Centro y Norteamérica (Costa Rica y Estados Unidos); dos de África (Camerún y Egipto); dos de Asia (Corea del Sur y Emiratos Árabes); y catorce de Europa (Alemania Federal, Austria, Bélgica, Checoslovaquia, Escocia, España, Holanda, Inglaterra, Irlanda, Italia, Rumanía, Suecia, Unión Soviética y Yugoslavia).
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La emisión italiana de 1988,
que anunciaba Copa del Mundo 1990 |
El Mundial con menor gol promedio de la historia tuvo una mascota falta de gracia, que hacía juego con esa pobre estadística: Ciao, un muñeco formado con cubos, con los colores de la bandera italiana y un balón como cabeza. Italia ilustró con su imagen la primera estampilla que emitió para anunciar el Campeonato, el 16 de mayo de 1988 (Scott 1742).
Al año siguiente, el 9 de diciembre, se emitió otra estampilla preparatoria del Mundial (Scott 1794) y, meses antes del inicio del certamen, el 24 de marzo de 1990, se puso en circulación una gran serie de 36 estampillas (Scott 1797a-f a 1802a-f) y seis hojas recuerdo con seis estampillas cada una (Scott 1797-1802). Las estampillas se ilustraron con los emblemas de las selecciones participantes y los estadios en los que se jugaría el Campeonato.
La estampilla que Italia emitió en 1989, como
preparación de la Copa del año siguiente.
La Copa italiana fue la última en la que se presentaron algunos países que, poco después, dejarían de ser tales o se transformarían como consecuencia de los cambios producidos tras el colapso de los “socialismos” reales: Alemania Federal, Checoslovaquia, Unión Soviética y Yugoslavia.
El de Italia fue un campeonato al que, tras cerca de tres décadas de ausencia, regresó la selección colombiana, esta vez conformada por una generación de jugadores dirigidos por Francisco Maturana, que atraería la atención de los fanáticos. Fue también el escenario en el que Camerún reveló las potencialidades del fútbol del África subsahariana.
Fue precisamente Camerún el equipo que inauguró el Campeonato el 8 de junio de 1990, enfrentándose a los argentinos. Se pensó que el encuentro sería un paseo para el campeón reinante, pero el triunfo uno a cero de los africanos mostró que algo había cambiado desde que Zaire fuera vapuleado en el campeonato de 1974; de hecho, Camerún tuvo ya una destacada actuación en el mundial de España, pero fue eliminada en la fase de grupos, luego de cuestionadas decisiones arbitrales y porque, pese a no haber perdido un solo partido, no alcanzó el puntaje necesario.
El jugador estrella de los africanos fue Roger Milla. Tenía 38 años cuando jugó el campeonato italiano y, según se dice, fue incluido en la selección por orden del hasta hoy presidente de Camerún, Paul Biya. Milla convirtió cuatro de los siete goles de su equipo, lo llevó hasta los cuartos de final, donde caería ante Inglaterra, y con su baile alrededor del banderín del córner inauguró una nueva forma de festejar los goles.
Las seis hojas recuerdo de la emisión italiana conmemorativa del Mundial de Fútbol de 1990. Las hojas incluyen todas las estampillas que también fueron parte de esta emisión.
Los seis campeones del mundo entonces existentes jugaron el mundial de Italia. Brasil y Uruguay no pasaron de los octavos de final, en los que fueron eliminados por otros dos campeones, Argentina e Italia, respectivamente. Los cuatro restantes llegaron hasta las semifinales: Inglaterra e Italia tuvieron que conformarse con el juego por el tercer lugar, que quedó en manos de los dueños de casa que vencieron a su rival por dos goles a uno.
La final de jugó el 8 de julio en el Estadio Olímpico de Roma y fue una repetición de la de cuatro años antes, entre Argentina y Alemania Federal; esta vez el triunfo correspondió a los alemanes por un gol a cero, tras un penal que solo vio el árbitro Edgardo Codesal, cinco minutos antes de la finalización del partido.
A la izquierda, los campeones de 1990. De izquierda a derecha, de pie, Thomas Berthold, Bodo Illgner, Hans Pfluger, Guido Buchwald, Rudi Voeller, Stefan Reuter y Klaus Aughentaler; en cuclillas, Thomas Haessler, Jurgen Klinnsman, Uwe Bein y Lothar Matthaus. A la derecha, la emisión italiana que rindió homenaje a los campeones.
El campeonato permitió al entrenador alemán Franz Beckenbauer igualar la marca del brasileño Mario Zagallo: ganar el Campeonato como jugador y como entrenador.
El 9 de julio Italia rindió homenaje al nuevo campeón con una estampilla en la que aparece el emblema de la selección alemana (Scott 1819).
Las dos hojas recuerdo y las tres estampillas que el Ecuador emitió para conmemorar el campeonato de Italia.
Ecuador también hizo una emisión de tres estampillas y dos hojas recuerdo (Scott 1234-1238) que salieron a la venta el 12 de julio. En una de las estampillas y en una de las hojas aparece un futbolista con el uniforme del nuevo campeón.
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